Como todos sabemos la fruta es uno de los alimentos más importantes en nuestra alimentación, están llenos de propiedades, por ejemplo:

  • El kiwi: es una fruta pequeña pero poderosa, ya que es una buena fuente de potasio, magnesio, vitamina E y fibra. Su contenido de vitamina C es el doble de la de una naranja.
  • La manzana: a pesar de que una manzana tiene un bajo contenido en vitamina C, tiene antioxidantes y flavonoides, que aumentan la actividad de la vitamina C, ayudando así a reducir los riesgos de cáncer de colon, ataque al corazón o ACV (Accidente Cerebro Vascular o “derrames”).
  • Las fresas: son un fruto de protección, ya que tienen el más alto poder antioxidante total entre las principales frutas y protegen al cuerpo contra el cáncer, la obstrucción de vasos sanguíneos y los radicales libres.
  • La naranja: le dicen la medicina más dulce por la gran cantidad de vitamina C que contiene. Tomar 2-4 naranjas al día puede mantener los resfriados a distancia, bajar el colesterol, prevenir y disolver los cálculos renales, así como también disminuir el riesgo de cáncer de colon.

Y aunque las frutas son un delicioso manjar y vienen repletas de beneficios y propiedades, es importante saber cómo y cuándo comerlas.

Qué no hacer:

  • NO comer después de las comidas, si comes fruta con el estómago vacío, está lista para ir directamente a través del estómago a los intestinos, sin embargo, si comes dos rebanadas de pan y luego una rebanada de fruta, la rebanada de fruta ya no puede ir directo a los intestinos pues el pan se lo impide.
  • Aunado a esto, si comes harina junto con la fruta ésta se pudre, se fermenta y se convierte en ácido.
  • En el momento que el fruto entra en contacto con la comida y con los jugos estomacales y digestivos, toda la masa del alimento comienza a echarse a perder.
  • ¡Se mezcla con la putrefacción de otros alimentos y produce gas y por lo tanto nos hinchamos!
  • NO beber jugos en lata, envases o botellas, ya que a parte de que no tienen las propiedades completas de una fruta fresca, esas latas pueden llevar guardadas mucho tiempo.
  • NO a las bebidas de jugo que se ha calentado.
  • No comerlas cocidas, porque NO se obtienen los nutrientes en absoluto, sólo se obtiene el sabor, cocinarlas destruye todas las vitaminas.

Qué sí hay que hacer:

  • Comer las frutas con el estómago vacío, esto desempeña un papel importante para DESINTOXICAR nuestro sistema, ya que suministra una gran cantidad de energía para la pérdida de peso y otras actividades de la vida.
  • Algunos expertos sugieren hacer ayunos de frutas de 3 días para limpiar o desintoxicar el cuerpo. Sólo comer frutas y beber jugo de fruta fresca a lo largo de los 3 días.
  • Esto funciona muy bien; aunque si lo quisieras llevar a cabo, hazlo siempre bajo supervisión médica, ya que depende de la salud de cada persona.
  • Comer una fruta entera es mejor que beber el jugo. Obtienes todos los beneficios de sus propiedades, en cambio, cuando lo hacemos jugo hay que tomarlo en el momento, de lo contrario se pierden varias propiedades en el inter.
  • Comer la fruta despacio, bocado a bocado, es importante llevar a cabo este proceso para que la fruta se mezcle con la saliva antes de tragarla.

Si sigues estos consejos, habrás dominado la forma correcta de comer frutas y tendrás el SECRETO de la belleza, la longevidad, la salud, la energía, la felicidad y el peso normal. No te preocuparán las canas, la pérdida de cabello, arrebatos nerviosos y círculos oscuros bajo los ojos. Esto no sucederá si comes la fruta con el estómago vacío.

Prueba alguna de nuestras recetas con fruta que te podrán gustar como Tarta de pera y kiwi, Manzana con queso cottage o Copa de merengue y fresa

¡Así que ya sabes, comer las frutas con el estómago vacío o antes de las comidas, conlleva muchos beneficios a la salud y evita varios malestares!

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